Para conseguir una taza de café deliciosa y aromática intervienen diversos factores, aunque el más importante sin duda es el tipo de café que se escoge. Esto definirá su consistencia, su aroma, su sabor y sus matices.
Si todavía no eres un experto en el mundo del café, seguro que pasas largos ratos delante del lineal de café intentando descubrir cual es la mejor opción para ti. Pues bien, hay un concepto con el que deberías empezar a familiarizarte: el tipo de tueste. ¿En qué consiste? ¿Qué diferencias hay entre el tueste natural, torrefacto y mezcla? Te lo contamos.
Diferencias entre el café de tueste natural, mezcla y torrefacto
Lo primero que hay que tener en cuenta es que cualquier buen café parte de un tueste natural, cuyas características dependen de la destreza del maestro tostador para obtener lo mejor de cada variedad de grano.
Una de las formas de clasificar el café es por la forma en la que se tuestan, un proceso fundamental en el que se definen el sabor y la calidad de los granos. Pero, ¿cuáles son las principales diferencias entre un café natural, un café torrefacto y un café mezcla?
- El café natural es el que se tuesta a partir de los granos de café en verde sin añadir ningún ingrediente extra que influya en su sabor.
- El café torrefacto es aquel cuyos granos verdes se tuestan añadiéndoles azúcar.
- El café mezcla combina los dos anteriores: café natural y café torrefacto.
Características del café de tueste natural
Como decíamos anteriormente, el café de tueste natural es el que se obtiene al tostar el café sin añadir ningún ingrediente adicional. Los dos únicos elementos que intervienen en el proceso de tueste natural son la máquina para tostar y el maestro tostador, que se encarga de extraer todas las cualidades del café, como el aroma y el sabor.
Características del café torrefacto
Este método nace por la necesidad de proteger/conservar los granos de café, y es que, cuando tuestas el café con azúcar se crea una película alrededor de los granos que los hace menos susceptibles a los agentes externos. A través de este proceso, efectivamente, se crea una “capa protectora” que evita que los granos se echen a perder demasiado pronto, pero el resultado es un café muy oscuro, amargo y muy fuerte, y de sabor muy intenso.
La difícil situación que vivió España durante la posguerra propició que el proceso de tueste torrefacto ganara popularidad, ya que este alargaba la vida del producto y permitía extraer más cafés con el mismo volumen de grano.
Razones para elegir siempre un café natural
Desde Cafés Orús recomendamos apostar siempre por cafés de tueste natural, solo así se consiguen apreciar los matices de un buen café y degustar todas las características organolépticas, ya que el café no está camuflado con ningún otro ingrediente. Dentro de los cafés naturales, son dos las variedades las que se pueden encontrar: Arábica y Robusta, que provienen de plantas diferentes. Son muchas las diferencias entre estas dos variedades, algunas se ven a simple vista y otras se aprecian al catarlo:
- CULTIVO: El café Arábica se cultiva a gran altitud y tiene menos cafeína, mientras que el Robusta se cultiva en zonas más bajas y tiene mayor cantidad de cafeína.
- MATICES: El café Arábica es muy perfumado, dulce, ligeramente ácido y con grandes matices de sabor, mientras que el Robusta es más amargo, con matices de frutos secos, madera o paja.
- PLANTA:Los árboles de la especie Arábica bajo libre crecimiento pueden llegar a medir entre 4-6 metros de alto, mientras que los árboles de la especie Robusta pueden llegar a medir entre 8 a 12 metros.
- CAFEÍNA: El grano de café Robusta tiene un 2,7% de cafeína mientras que el Arábica tiene un 1,5%.
- AZÚCARES: El café Arábica tiene un 60% de lípidos, aproximadamente el doble que el café Robusta.
- PRODUCCIÓN: El 75% de la producción cafetera en el mundo es Arábica, mientras que el 25% restante (aproximadamente) es de Robusta.
Como curiosidad os contamos que el Robusta suele ser utilizado para la elaboración de cafés espressos ya que permite obtener una crema más espesa, aunque menor aroma y sabor, algo completamente en contra de la filosofía de Cafés Orús, que siempre apuesta por la calidad en todos sus productos.