¿Sabías que los granos de café etíopes se agrupan en función de su origen geográfico? Partiendo del origen, el café se clasifica en grados de calidad, entre el 1 y el 9. Además, también se dividen en 4 grandes grupos: lavados comerciales, naturales comerciales, especiales lavados y especiales naturales. Etiopía es un café de origen complejo. Los cafés etíopes varían mucho según la zona e incluso es posible encontrar ciertas diferencias entre un lote a otro.
Etiopía es la cuna del café y sus bosques, concretamente en la región de Kaffa, el lugar donde ser encontraron los cafetos arábicas de manera silvestre. Actualmente, los granos de esta región representan un papel fundamental en la economía y la cultura del país. El café forma parte de sus vidas, razón por la que lo consumen asiduamente y de manera ceremonial, recorriendo todo su ciclo de vida.
Uno de los puntos que más influyen en el gusto del café es el proceso húmedo o seco, que determina dramáticamente su sabor. Etiopía, por ejemplo, utiliza ambos (según la zona). El proceso seco consiste en el secado de la cereza del café en patios bajo el sol, para retirar luego la piel, la capa de mucílago y la cáscara de pergamino de protección que rodea a la semilla de un solo golpe.
El mejor café procesado en seco podría ser el de la región de Harar, donde surge un café de cuerpo medio y acidez brillante con tonos afrutados. Por otra parte, el mejor café lavado se cultiva en las zonas de Yirgacheffe y Sidamo (donde también se utiliza el método seco), al Sur del país cercano a Kenia.
El proceso de lograr granos de café extraordinarios es cuanto menos laborioso, ya que se seleccionan visualmente de forma manual . ¿El resultado? Una taza de café con fragancia, notas secas y afrutadas, de sabor único y exótico.